Objetivos
La innovación abierta se ha generalizado entre las grandes corporaciones como la fórmula más eficiente para ampliar sus capacidades de innovación, fuera de la empresa, y diversificar las fuentes de ingreso futuro, reduciendo al tiempo el riesgo de la actividad innovadora.
Sin embargo, esta aproximación no es frecuente entre las empresas de pequeño y mediano tamaño, aunque es la fórmula que mejor se adapta a sus dificultades para la gestión de la I+D, dificultad para asumir el riesgo y falta de disponibilidad de personal cualificado.
Esta falta de inversión en I+D+i por las empresas de menor tamaño, además de mermar sus capacidades de crecimiento y de competitividad, lastran la convergencia en I+D/PIB de territorios cuyo tejido empresarial está formado mayoritariamente por pymes y microempresas, como es el caso de las regiones que componen la EUROACE (Extremadura 0,65%, Alentejo 0,7% y Centro 1,3%) quedando muy lejos de la media europea del 2,32%. Si bien es cierto, que en Alentejo y Centro el sector privado supera el 50% de participación en el gasto en I+D, mientras en Extremadura apenas supera el 25%. Siendo la inversa en el caso del sector público de investigación, con lo que se da una situación estratégica complementaria, que justifica la cooperación transfronteriza.
Converger en materia de I+D+i, y estimular la transferencia tecnológica son desafíos, tanto de las RIS3 de las regiones participantes, como de la estrategia EUROACE 2030, que invitan a avanzar hacia un ecosistema transfronterizo de innovación, aumentando así la masa crítica y el poder tractor del conjunto. El proyecto DRIVEN propone un modelo de innovación abierta guiada por retos, en las áreas de especialización RIS3 compartidas, con una metodología específica de gestión distribuida en el territorio y orientada a la pyme, que se adecúe a las particularidades del área de cooperación en términos geográficos y socioeconómicos.
Para ello, se parte de actividades de generación de cultura y capacidades en gestión de la innovación en la pyme, la creación de una plataforma de gobernanza del ecosistema transfronterizo de innovación abierta, el lanzamiento de convocatorias de soluciones tecnológicas a retos expresados por las pymes participantes, y, por último, un proceso de incubación y aceleración de las iniciativas tecnológicas surgidas de estas conexiones en la red de espacios y recursos de incubación que poseen los socios, distribuidos por toda la EUROACE.