Descripción del Proyecto
La transformación digital que ha vivido Europa en las últimas décadas ha afectado a toda la población y sectores económicos. Concretamente, España y Portugal ocupan la 9 y 16 posición, respectivamente, en el Índice de la Economía y Sociedad Digital (DESI) del 2021. Además, la digitalización de los datos analógicos de los servicios públicos y privados ha avanzado rápidamente desde la pandemia del COVID-19. Esta digitalización se ha aplicado a todos los sectores de la administración pública. Este avance conlleva que la ciudadanía adquiera nuevas competencias y conocimientos digitales para la vida cotidiana e inserción laboral. En este sentido, uno de los ejes del Plan de Recuperación y Resilencia (PRR) de España en el ámbito digital es reforzar las competencias digitales de la población española.Sin embargo, la inserción en el mundo digital no está exenta de riesgos, especialmente en población más vulnerable como son los jóvenes y los mayores. Los riesgos digitales más importantes para la población joven son entre otros el ciberacoso, cibercontrol, sexting, sextorsión, retos virales que puedan ser un peligro para la integridad física y psíquica del menor, compartir fotos inapropiadas en la red, recibir chantajes digitales, adicción digital, juego y apuestas online, o el consumo inapropiado de contenidos para la edad (pornografía, violencia, imágenes inapropiadas, etc.). Estos riesgos digitales pueden llevar al fracaso escolar y afectar a la salud física, psíquica y social del menor. Por otro lado, los mayores donde la brecha digital es mayor también son más vulnerables a las estafas digitales, compras compulsivas inducidas por la publicidad engañosa, gastos telefónicos desorbitados, incluso relación con negocios ilegales que pueda afectar a la economía del mayor y/o familia. Las zonas rurales del espacio cooperación trasfronteriza, caracterizadas por tener una población envejecida, son más sensibles a sufrir estos riesgos digitales. Incluso el miedo a estos riesgos digitales puede hacer que la población genere reticencias al mundo digital aumento también el riesgo de aislarse digitalmente por un bajo uso en estas regiones.
Por todo ello, el proyecto SSS pretende desarrollar una página web y una aplicación para dispositivos móviles destinada a la población joven y adulta de zonas rurales trasfronteriza para que puedan detectar los riesgos digitales y evitarlos. Además, se desarrollará una estrategia educativa para capacitar a la población joven y adulta en una autonomía digital segura y sostenible. Se realizará un pilotaje y evaluación de las herramientas y estrategia educativa desarrollas en el proyecto en centros de enseñanza secundaria (población joven) y centros de mayores de las zonas rurales transfronteriza.
Como indicadores de realización del proyecto pretendemos que nuestra herramienta llegue al menos a 20 centros públicos (colegios y centros de mayores) de las zonas rurales trasfronteriza de España y Portugal. Además, pretendemos llegar a una participación de entre 20 y 30 personas diferentes en nuestra acción conjunta. Como indicación de resultados a final del proyecto, nos planteamos llegar a 18.000 usuarios de los servicios públicos generados de nuestra acción (6.000 usuarios/año).